FTP, FEED, WEB.......
Bajo este prometedor título no se esconde más que una -espero transitoria- frustración. El caso es que quiero aprovechar el espacio en la red que Telecable ofrece a sus usuarios, sobre todo para colgar archivos de video y audio, y luego enlazar desde mi Bitácora. Quizá aproveche la circunstancia para aprender algo de arquitectura web (creo que lo llaman así), y en el futuro crear otro espacio donde volcar algunas cosillas que ahora cuelgo exclusivamente en la Bitácora, sobre todo los temas más personales. Pero no es tan fácil; al menos para mi. Y menos mal que tengo la inestimable ayuda de mi mentor en este mundo, mi amigo Pablo, que me guía. El caso es que llevo toda la tarde intentando hacer lo que debiera poder hacerse en un par de minutos, y siempre dependiendo de terceros. Me gustaría ponerme un poco al día con todo esto, pero sin duda va a exigirme tiempo. Y no veo que sea fácil encontrar información explicada en lenguaje "lerdo" para pre-iniciados. Veremos en que queda esto. Mañana hablaré con Pablo y supongo que como siempre me sacará las castañas del fuego. A propósito: a tope el amagüestu.
Comienza el concierto con un par de temas interpretados por Joseph Calderazzo al piano. Él solo. En un continuo "crescendo" rompe los compases continuamente con progresiones de blues, pasando por ritmos latinos o con las más frenéticas escalas de Jazz. Unos minutos más tarde se completa el cuarteto sobre el escenario, y comienza el verdadero espectáculo. El Jazz más trepidante dejó a alguno (a mí concretamente) más desestructurado que la tortilla de Ferrán Adriá ( los huevos por un lado, la patatina por otro...). En pocos segundos todos estábamos perfectamente conectados con el espectáculo, pasando de tormentas de puro virtuosismo al desarrollo de lentas melodías. Por la parte que me toca, diré que me sorprendió tremendamente el baterista, Jeffrey Lynn Watts, que lejos del derroche de extrema virtuosidad exhibido por bateristas más próximos al número circense que al servicio de la banda, ocupó su lugar en el escenario con desarrollos típicos del Jazz más clásico, pero con guiños muy personales y un toque de clase, principalmente escobillas en mano, de los que ya se ven poco. Todo un señor del Jazz. Marsalis magnífico, al igual que Calderazzo y Revis, el bajista: de otro planeta. Como siempre, salgo del teatro desconcertado, con el mismo dilema de siempre: ¿Que hago?, ¿quemo la batería o le saco brillo?.-
Quizá recordéis el famoso caso de Nevenka Fernández, que acusó al ex-alcalde de Ponferrada, su "jefe", de acoso sexual. Quizá recordéis que el juez falló a favor de la demandante, osea Nevenka, e Ismael Álvarez, el alcalde, fué condenado. No recuerdo en qué consistió la condena, pero de cualquier forma según él mismo y sus defensores "ya ha pagado su deuda con la sociedad", tanto que en su pueblo le quieren poner su nombre a un Centro Cívico. Esto es demasiado. Él, muy político, para evitar enfrentamientos locales, ha decidido que no se ponga su nombre al centro, pero eso sí, ha cargado contra los que no quieren "concederle el beneficio de la duda". ¿Pero cómo es esto?. Este individuo sigue con su vida normal después de ser acusado de acoso sexual, se le hacen homenajes y todo, y Nevenka, la víctima, tiene que vivir fuera de España a causa tanto del rechazo de un amplio sector de la sociedad como del acoso de la prensa asquer-rosa. Digo yo que muy bien por esa magnífica gente de Dehesas que se caga en la justicia y en todas las mujeres acosadas de este mundo que ni siquiera pueden lograr una sentencia favorable y clara como la que consiguió Nevenka, y que han recibido una estupenda lección de lo que le puede pasar a una mujer que no da su brazo a torcer por la imposición de un auténtico indeseable. Ganar un caso de este tipo es prácticamente imposible, aún con tu cargamento de pruebas, y ahora además sabemos que una vez ganado el caso, has perdido tu vida, y te vas de tu ciudad no vaya a ser que tus hijos acaben jugando en un parque con el nombre de tu atacador. Un elemento como Ismael Álvarez, sin escrúpulos, sigue caminando su ciudad, como si nada. ¿Y donde está Nevenka?. Su historia ha quedado reflejada en un libro, escrito por Juan José Millás, con el título de "Hay algo que no es como me dicen", y cuenta las penurias de esta mujer que llegó a sufrir el rechazo de parte de su propia familia, que no daba crédito a lo que Nevenka denunciaba. 
Mañana Jueves día 28 de Octubre, desde Oviedo, partimos para AVEIRO (Portugal), Cova, sus padres y yo. Poco o nada sé sobre Aveiro salvo que la llaman "la pequeña Venecia", debido, como no, a su sistema de canales. Es uno de esos viajes que no programas con tiempo, sino que surgen de repente, por invitación esta vez de mis suegros. A ver que tal. Estaremos de vuelta el próximo Domingo 31 de Octubre (por cierto, el día de mi cumpleaños). Entonces os contaré que tal fué el viaje y seguramente os mostraré alguna foto del lugar. Algo de información sobre Aveiro 
En esta ocasión quiero aprovechar este espacio para presentaros a 
Si señor. Nos vamos de boda a León, y esta vez les toca el turno a los únicos e incomparables Henar y Job. ¡Ay!, ¡qué pocos van quedando!. Las cuentas salen enseguida: Ramón y Piru. Así que a ver si nos espabilamos, que ya va siendo hora. Uno porque ya está en ciernes y el otro porque ya está bien de tanto "living la vida loca-soy el rey de los saraos". ¡Responsabilidad es lo que hace falta!. Por Madrid también me quedan "Mr.Duque-Juanma-Job" y Cris. Sería una excusa cojonuda para un sarao de fin de semana. En fin, que enhorabuena a los premiados, que sean muy felices y que coman ricos manjares (y el resto de los invitados también), y los demás que vayan tomando nota. 
Hace ya unas dos semanas que vimos la película en cuestión, pero no es hasta ahora que me decido a escribir aquí unas líneas. Lo primero de todo es decir que la película me encantó, y me encantó en todos los sentidos ya sea fotografía, música, actores, ritmo etc. Desde mi modesta opinión, sin ser un experto en el Arte cinematográfico, creo que es una gran película. Pero además parece ser un fenómeno nacional ya que trata el controvertido tema de la Eutanasia. No quisiera en este momento entrar en el debate de eutanisia si-eutanasia no, porque no es este el tema exactamente. Lo que me llama poderosamente la atención es algún comentario escuchado, pienso que en ocasiones avalado por las críticas vertidas en los medios por críticos supuestamente independientes y expertos. Estos comentarios tachan la película, entre otras cosas, de "oportunista". Que alguien por favor me explique que quiere decir esto. Para empezar, las películas no dejan de ser buenas o malas por el hecho de ser oportunistas, pero es que sigo sin entender porqué una película así es oportunista. Lo entendería si por ejemplo se debatiera en el congreso la conveniencia de legislar la Eutanasia o no, y el otro debate, el social, estuviera abierto. Pero no es este el caso. También se dice que Amenabar hace un claro alegato en favor de la Eutanasia. Me parto. Personalmente creo que ha sido muy honesto al reflejar los distintos puntos de vista sobre el tema en cuestión, que fueron los que fueron, porque no olvidemos que es una historia real, adaptada al lenguaje cinematográfico, pero real. Y en este caso concreto pienso que es la mejor forma de afrontar la película como espectador, como la historia de un personaje singular, fuera de lo común cuya vida merecía la pena que fuese contada. Lo que más gracia me hace es oir que la película es ñoña o lacrimógena, que busca la lágrima fácil. Hombre, yo no fui engañado a ver la película. Sabía quien era Ramón Sampedro, había estado al tanto de su lucha. Incluso el día antes de ir a ver la película me encontré casualmente que en televisión pasaban una entrevista que Televisión Española había realizado hace ya años, y ya viendo la entrevista los ojos se te llenaban de lágrimas. Y tengo que decir que muchos de los diálogos están sacados casi literalmente de esas entrevistas. ¿Lágrima fácil?. Por supuesto, es que la historia es muy dura coño. Pero insisto, es que además es la que es. 
Ayer Domingo 26 pude disfrutar de una nueva entrega del Daily Show de Jon Stewart (Global Edition) en el canal 
Pues sí. Un 20 de Agosto de 1999 en Cudillero se oyeron entre otras las palabras "sí consiento". Toda la vida pensando cómo será lo del "sí quiero" y de repente el Alcalde de turno te pide que respondas "sí consiento" en vez del típico "sí quiero". Pero a la larga comprendí que una relación de convivencia con la persona que además quieres va entre otras cosas de saber cuándo hay que consentir y cuándo no. Y no me meto más allá por este berenjenal. El caso es que sin darme cuenta pasaron cinco años, pero que nos quiten lo bailao. 
